Luego de tres años desde las acusaciones de acoso y abuso sexual en Ubisoft que llevaron a los despidos de varios empleados, la compañía declara su compromiso de crear entornos de trabajo más seguros. La jefa de personal, Annika Grant, lo confirmó durante un evento en septiembre.
Annika Grant asumió su rol en 2021 en un momento en que Ubisoft enfrentaba una crisis de mala conducta. La dirección había perdido la confianza de los equipos, y muchos veían al departamento de recursos humanos como parte del problema.
Ubisoft afrontó este desafío mediante la implementación de un sistema interno que permite a los empleados denunciar conductas inapropiadas, junto con la creación de un código de conducta y la obligatoriedad de capacitaciones para todo el personal.
La sombra de los problemas del pasado aún acecha a Ubisoft.
A pesar de los esfuerzos por mejorar su cultura laboral, Ubisoft aún lidia con las secuelas de los casos de acoso de 2020. Aunque Annika Grant señala que están en el camino correcto hacia un entorno laboral más seguro, la sombra de los problemas del pasado aún acecha a la empresa.
Los exempleados detenidos fueron el vicepresidente Tommy Francois y a Serge Hascoet, quien fue la mano derecha del CEO Yves Guillemot. Ambos han sido interrogados y si las autoridades consideran que existen pruebas suficientes, esta situación podría dar lugar a una investigación penal contra la empresa.
Grupos como A Better Ubisoft continúan expresando su descontento con la dirección de la empresa, argumentando que parece no comprender plenamente la gravedad de las acusaciones ni las preocupaciones de sus empleados. Estos problemas se han complicado debido a los desafíos financieros que ha enfrentado Ubisoft en el último año, lo que ha resultado en despidos y la cancelación de proyectos.
Fuente: GamesIndustry.biz