En la actualidad, Unreal Engine 5.2 no ha sido ampliamente adoptado en muchos juegos, lo que dificulta evaluar su eficiencia. Sin embargo, el equipo de Digital Foundry ha realizado pruebas con una demo del motor, revelando que no escala de manera óptima en procesadores con múltiples núcleos.
Al analizar el rendimiento de una CPU Intel Core i9-12900K con 16 núcleos y 24 hilos en varias configuraciones, se ha encontrado que el aumento de rendimiento en el CPU con más de seis núcleos es limitado. Por ejemplo, agregar dos núcleos adicionales solo resulta en un aumento del 6%.
Al emplear el Core i9-12900K con ocho núcleos y subprocesos habilitados, el aumento de rendimiento es inferior al 4%. Esto sugiere que Unreal Engine 5.2 tiene limitaciones de rendimiento en términos de CPU.
Un CPU de 6 o 16 núcleos no hace mucha diferencia en Unreal Engine 5.2.
El equipo destaca que los poseedores de tarjetas gráficas Ada Lovelace (GeForce RTX 40) pueden mitigar la limitación del procesador en Unreal Engine 5.2 gracias al DLSS 3. Esta tecnología resulta de gran ayuda para aliviar la carga del CPU.
El análisis señala que los poseedores de las GPUs GeForce RTX 40 pueden mitigar en gran medida la limitación del procesador en Unreal Engine 5.2 gracias a DLSS 3. Esta tecnología proporciona una ayuda significativa en el cuello de botella del CPU.
Digital Foundry concluyó que el problema conocido de stuttering debido a la compilación de shaders también persiste en Unreal Engine 5.2. Sin embargo, se ha introducido una nueva forma de compilar shaders que puede reducir significativamente el problema, aunque no se elimina por completo.
Fuente: Eurogamer