En octubre de 2011, la firma coreana Samsung sorprendió con un dispositivo móvil que inauguró una nueva tipología a medio camino entre un smartphone y un tablet.
Tras su anuncio oficial se produjo un clima de escepticismo y todo apuntaba a que sería un dispositivo muy minoritario debido a su excesivo tamaño, pero el tiempo ha demostrado que estábamos equivocados y Samsung ya puede presumir de haber vendido la friolera de siete millones de unidades en todo el mundo -está claro que no es tanto como otros super ventas como el iPhone 4S o el Samsung Galaxy S2, pero aun así es una cifra muy elevada para un smartphone de estas características-.
En octubre de 2011, la firma coreana Samsung sorprendió con un dispositivo móvilque inauguró una nueva tipología a medio camino entre un smartphone y un tablet. Se trata del Samsung Galaxy Note, un terminal que pulverizó todas las barreras en lo que se refiere a pantallas grandes al equipar un panel de nada menos que 5,3 pulgadas en diagonal. Tras su anuncio oficial se produjo un clima de escepticismo y todo apuntaba a que sería un dispositivo muy minoritario debido a su excesivo tamaño, pero el tiempo ha demostrado que estábamos equivocados y Samsung ya puede presumir de haber vendido la friolera de siete millones de unidades en todo el mundo -está claro que no es tanto como otros super ventas como el iPhone 4S o el Samsung Galaxy S2, pero aun así es una cifra muy elevada para un smartphone de estas características-.