Hoy tenemos para revisar uno de los SSDs más rápidos del mercado, que nos trae Gigabyte bajo su línea gamer, el AORUS RGB M.2 NVME 256GB, que como su nombre indica utiliza conector M.2 y protocolo NVME, alcanzando altas velocidades de transferencia, que, spoiler alert, superan los 3000MB/s.
Basado en un controlador Phison y memorias TLC NAND de Toshiba, acompañado de un disipador de aluminio y RGB en el logo de AORUS, este SSD combina rendimiento y estética, siendo ideal para sistemas de alto rendimiento que requieran almacenamiento de alta velocidad.
Primera Mirada
El SSD viene en una caja premium de color negro con texto y logo de AORUS metalizados, ya dando una excelente impresión de que lo que hay dentro será bueno.
En su parte trasera tenemos sus especificaciones básicas en varios idiomas, y etiquetas para identificación.
El SSD viene super bien protegido dentro de la caja, con una goma de alta densidad que absorberá golpes durante el traslado de la fábrica hasta nuestra casa.
Para eliminar el calor de su controlador y sus chips de memoria superiores, tiene un gran disipador de aluminio, que cuenta con un logo de AORUS iluminado con RGB en el centro, para combinar estética y rendimiento como buen producto premium que busca entregar Gigabyte.
En el lado inferior no se tiene disipación ya que solo tenemos chips de memorias y su calor generado es ínfimo, por lo que tampoco es necesario.
Software
Una de las dos utilidades que lanzó Gigabyte para este SSD es RGB Fusion, que no solo es compatible con este SSD sino todos los productos con RGB de la empresa, incluyendo sus placas madre y tarjetas gráficas, que como su nombre indica permite ajustar todo lo relacionado al RGB. Encontraremos distintos efectos, opciones de brillo y velocidad, y por supuesto el ajuste de color.
Luego está la herramienta SSD Tool Box, para el monitoreo y tareas específicas relacionadas al SSD, incluyendo funciones de optimización y borrado seguro.
Plataforma de pruebas
- Procesador: Intel Core i7-9700K
- Placa Madre: Gigabyte Z390 Designare
- Memorias ram: Corsair Vengeance PRO RGB 3200 C16
- Fuente: EVGA G2 1000W
- SO: Windows 10 64bit
Pruebas de rendimiento
Las lecturas de este SSD son muy buenas, alcanzando casi 2200MB/s en Anvil’s Storage Utilities. Las escrituras sin embargo están bastante lejos de ello, quedando en casi 1000MB/s.
En AS SSD Benchmark también se obtuvieron excelentes lecturas, con más de 2600MB/s en este test, mientras que el resultado del test de escritura nuevamente fue cercano a los 1000MB/s.
También probamos Atto Disk Benchmark, alcanzando una lectura de 3205MB/s y una escritura de poco más de 1000MB/s, también excelentes valores.
inalmente está CrystalDiskMark, con velocidad de lectura de 3097MB/s y de escritura de 1047MB/s, nuevamente excelentes resultados.
Tiempo de carga F1 2019
En la carga de juegos llega un punto en el que por más velocidad que se agregue, el procesamiento limita los tiempos de carga y por eso un NVME no agrega demasiado sobre un SSD convencional. De todas formas es mucho mas rápido al descomprimir juegos o verificar archivos, por lo que tiene sus ventajas.
Temperaturas
Sin dudas el agregado de un disipador mejora mucho las temperaturas, y podemos ver como se calienta el disipador indicando que hace un buen contacto. Esta reducción de temperaturas reduce el throttling después de pasar grandes archivos, por lo que trabajará a altas velocidades durante tiempos más prolongados.
Conclusión
Sin dudas el SSD de Gigabyte es una buena opción para el que busca lecturas de máxima velocidad, y una velocidad rápida de escritura, que si bien es bastante desproporcional, ronda los 1000MB/s que es mucho más que un SSD Sata III convencional.
Actualmente ronda los $6500, lo cual es bastante alto para un SSD de 256GB, aunque esto se debe a que se consigue en pocas tiendas y su precio debería bajar cuando ingresen nuevamente y haya mayor stock. Sin dudas es un producto de calidad y acompañado de un buen software, así que les recomendamos estar atentos a sus precios futuros para evaluar si conviene o no adquirirlo.
Lo recomendamos ampliamente a quienes quieran aumentar sus velocidades de lectura de forma significativa, y realicen escrituras ocasionales pero busquen que sean rápidas, y también busquen una buena estética y personalización en su SSD.