Elon Musk parece estar cumpliendo sus amenazas y ya no quiere comprar Twitter. El equipo legal del CEO de SpaceX presentó una carta ante los reguladores de valores, alegando que el gigante de los medios y Musk firmaron el acuerdo de compra en base a datos falsos y engañosos. Desafortunadamente para Musk, la junta directiva de Twitter no está de acuerdo y se está preparando para emprender acciones legales.
La carta, presentada el viernes por el asesor legal de Musk, afirma que los representantes de Twitter no cumplieron con las obligaciones contractuales de proporcionar información sobre la prevalencia de bots, cuentas de spam y otras cuentas falsas en la plataforma. El representante del equipo legal de Musk, Mike Ringler, dice que Twitter ignoró las solicitudes de información varias veces, rechazo injustificadamente a las consultas de Musk con información incompleta o inexacta mientras afirmaba que cumplió con todo.
Elon Musk ya no quiere comprar Twiter
De esta forma lo tenemos a Musk reclamando estos datos de Twitter desde mayo, cuando el director ejecutivo declaró que la compra estaba en suspenso hasta que Twitter proporcionara hechos que respaldaran las afirmaciones en un artículo de Reuter publicado anteriormente. Musk y su equipo insisten en que la información es necesaria para realizar un análisis exhaustivo de los bots y otras cuentas falsas en la plataforma de redes sociales.
Los representantes de Twitter no parecen estar aceptando estas acusaciones a la ligera. A pesar de las afirmaciones de que la plataforma ha estado ocultando información relevante para la adquisición negociada, el jefe de la Junta Directiva de Twitter, Bert Taylor, dejó claro que la empresa emprendería acciones legales y tiene la intención de hacer cumplir los términos de adquisición negociados previamente.
Si se compra o no la red social, todo esto parece haber afectado sus resultados financieros, cayendo las acciones entre un 5% y un 6% mes a mes.
No hay garantía legal de que a Musk se le permita retirarse del acuerdo multimillonario ya negociado. De acuerdo con el acuerdo vigente, Twitter o Musk podrían ser responsables de una tarifa por cancelar el acuerdo de mil millones de dólares en caso de que cualquiera de las partes se retire de la oferta acordada.