Esta semana, falleció Kevin Mitnick, uno de los hackers más buscados del mundo, a los 59 años, después de luchar contra el cáncer de páncreas por más de un año en el Centro Médico de la Universidad de Pittsburgh. Su obituario describe su vida como una historia de ficción, lo cual es una forma adecuada de describir su increíble historia.
En 1979, Mitnick hizo su primera infiltración en un sistema informático, pero en 1988 fue declarado culpable por copiar software de una empresa y condenado a 12 meses de prisión.
Durante su libertad condicional, Mitnick se infiltró en los correos de voz de Pacific Bell, una compañía telefónica. Luego, como fugitivo en los 90, pirateó redes celulares, sitios web gubernamentales y de empresas. Si bien estuvo involucrado en el robo de miles de archivos y números de tarjetas de crédito, su obituario destaca que «nunca tomó un centavo de ninguna de sus ‘víctimas'».
Kevin Mitnick fue uno de los hackers más buscados del mundo.
En 1995, Mitnick fue capturado y acusado de acceso telefónico ilegal, fraude de dispositivos y computadoras. Se sospechaba que tenía acceso a secretos comerciales corporativos valuados en millones de dólares.
Después de pasar cinco años en prisión, Mitnick transformó su carrera, convirtiéndose en un hacker de sombrero blanco y consultor de ciberseguridad. En 2011, se unió a KnowBe4 como copropietario y director de piratería informática, ofreciendo capacitación en seguridad y una plataforma de phishing simulada para sus clientes.
En una publicación de blog, la compañía reconoció que desde que Kevin asumió el rol de «Director de piratería», inspiró el plan de estudios de capacitación de KnowBe4 y contribuyó significativamente a aumentar el prestigio de la marca en la industria. Su vasta experiencia en ingeniería social quedó permanentemente integrada en el ADN de KnowBe4.
Fuente: BBC