Tregua de 5 años es lo que ofreció Samsung a Apple en la guerra de patentes, todo esto para evitar así una considerable multa de Bruselas por abuso de posición dominante.
Samsung acordó no demandar por un periodo de cinco años a las empresas que acepten un determinado marco de concesión de licencias.
No se les impondrá la medida cautelar para impedir la comercialización de productos que se basan en sus patentes esenciales de tecnologías presentes en móviles inteligentes o tablets.
Pero si en el plazo de 12 meses no se resuelve la concesión de licencias, las partes deberán someterse al fallo de un órgano judicial o de arbitraje.
«Si encontramos una solución satisfactoria en este caso, aportará más claridad al conjunto del sector sobre estas cuestiones», declaró el vicepresidente de la Comisión y responsable de Competencia, Joaquín Almunia, en un comunicado.
De hecho, la investigación formal de Bruselas contra Samsung se remonta a enero de 2012 con el objetivo de analizar si el uso de alguna de sus patentes fue abusivo.
Samsung había reclamado en 2011 medidas cautelares para paralizar la venta de dispositivos móviles de empresas rivales en el mercado europeo alegando violaciones de algunas de sus patentes.
En ese marco, Bruselas sostuvo que la empresa coreana podría haber incumplido el «compromiso irrevocable» que asumió en 1998 ante el Instituto Europeo de Estándares de Telecomunicaciones, cuando garantizó que concedería licencias en condiciones justas, razonables y no discriminatorias.
En caso de que el test de mercado confirme que la oferta de Samsung podría corregir estos abusos, el Ejecutivo comunitario la convertirá en jurídicamente vinculante.