Buenas noticias para los usuarios de Ryzen: Los problemas de latencia de la caché L3 y de elección del núcleo preferido presentes en Windows 11 que disminuían el rendimiento del CPU en hasta un 15% ya fueron solucionados mediante una reciente actualización del sistema operativo y una actualización de drivers respectivamente.
La actualización KB5006746 de Windows 11 soluciona el problema con la caché L3, mientras que el problema de elección de núcleo preferido se soluciona con los Chipset Drivers 3.10.08.506 de AMD. La compañía roja aclara que en procesadores Zen+ y Zen 2 además es necesario activar el perfil de energía AMD Ryzen™ Balanced para garantizar que se elijan los núcleos de manera correcta y así maximizar el rendimiento.
Esta actualización es algo clave no solo para los usuarios, sino para la propia AMD, ya que los reviews de Alder Lake llegarán el 4 de noviembre, por lo que varios reviewers probarán sus procesadores Zen 3 en Windows 11 y no sería bueno que el rendimiento se vea disminuido por estas fallas. Con estas actualizaciones, ahora se podrán comparar ambas familias de CPUs de manera correcta, garantizando una justa comparación entre rojos y azules.