Ya es algo normal reinstalar Windows en las nuevas PCs para conseguir un sistema completamente limpio. Gracias a un cambio en Windows 10 , podemos obtener una copia nueva de Windows en cualquier PC sin necesidad de descargar un archivo ISO o la reinstalación de Windows.
Este sistema de recuperación es otra de las grandes mejoras que llegaran con Windows 10.
Podremos restaurar la PC sin que esto afecte a nuestros archivos, especialmente indicado en casos en que nuestro equipo no funciona bien y no queremos perder lo que tenemos instalado.
También restauraremos la PC a los valores de fábrica, especialmente útil cuando compramos ordenadores prefabricados o portátiles que, como sabemos, suelen venir con mucho bloatware. Con este proceso devolvemos el equipo a su estado de fábrica sin tener que utilizar la imagen de recuperación del fabricante, obteniendo una instalación limpia de Windows 10.
De esta forma no será necesario formatear el equipo ni contar con una ISO descargada de nuestro sistema operativo, algo que sí es necesario en Windows 7 y Windows 8.1 si queremos acabar con el bloatware y conseguir la tan ansiada instalación limpia.