Western Digital está enfrentando una demanda debido a problemas en sus SSD portátiles de SanDisk, generando más que solo molestias en los usuarios. Casos individuales se unen en cooperación, alegando desconexiones y fallos en PCs afectando no a decenas, sino a cientos de miles de personas en EE.UU.
En los últimos meses, diversos usuarios han presentado quejas con respecto a los productos de Western Digital, especialmente en relación a las actualizaciones de firmware que se implementaron en mayo y julio de 2023. Estas actualizaciones tenían como objetivo principal prevenir desconexiones inesperadas de los SSD portátiles de Sandisk. Claramente no solucionaron nada.
Las demandas contra Western Digital se centran en los productos SanDisk Extreme Pro, Extreme Portable, Extreme Pro Portable y WD My Passport SSD. Los informes indican que la actualización de firmware de julio agravó el problema, llevando a la inaccesibilidad de datos, y el borrado de los mismos, para algunos usuarios. Pueden ver los detalles completos disponibles a través este enlace.
Western Digital enfrenta un nuevo desafío con estas demandas por productos defectuosos, planteando la posibilidad de pérdidas financieras y daño a la marca. La empresa podría experimentar repercusiones tanto en acciones como en la confianza del consumidor.
Incluso, en ocasiones, los SSD pueden entrar en modo de solo lectura, resultando en pérdida de datos significativa. La falta de respuesta oficial por parte de Western Digital aumenta la preocupación por el impacto que tendrán las acciones legales, especialmente en operaciones comerciales. La empresa aún no ha establecido una fecha para su presentación ante el juez.
Fuente: Techzine