Han pasado más de tres meses desde la invasión Rusa a Ucrania. En este tiempo empresas y países de todo el mundo han realizado varias sanciones económicas a Rusia. Esta vez, Taiwán anunció que solo venderá chips que operen por debajo de los 25 MHz a empresas Rusas y Bielorrusas. Estos chips deberán ofrecer un rendimiento cercano a los 5 GFLOPs, esto es mucho menos que el poder de una PS2. Esto quiere decir que los dos países no podrán contar con ninguna tecnología moderna proveniente de uno de los mayores fabricantes del mundo.
La decisión provino del Ministerio de Asuntos Económicos de Taiwán, que publicó una lista de artículos que no se pueden exportar a Rusia y Bielorrusia. Esta lista se refiere a cualquier tecnología de punta desarrollada en el país, así como a los instrumentos y maquinaria utilizados para fabricar los chips.
La prohibición abarca artículos que se enmarcan en las categorías 3 a 9 del Acuerdo de Wassenaar, un acuerdo que se refiere al control de exportaciones de bienes tecnológicos, entre otras cosas, en el que participan 42 países, estando compuestos en su mayoría por América del Norte y Europa, continentes que más impusieron sanciones a Rusia y Bielorrusia.
Estos grupos se refieren a la electrónica, la informática, las telecomunicaciones, la seguridad de la información, los sensores y los láseres, la navegación y la aviación, la marina, la propulsión aérea y la industria aeroespacial.
Ambos países no pueden comprar chips que tengan las siguientes especificaciones técnicas:
- Rendimiento de más de 5 GFLOP
- Operar a 25 MHz o superior
- Más de 32 bits
- Tener una conexión externa con transferencia de datos de 2,5 MB/s o más
- Tener más de 144 pines
- Tener un retraso operativo de menos de 0,4 nanosegundos
- Además, las empresas de Rusia y Bielorrusia no podrán comprar ningún tipo de equipo como escáneres, microscopios o cualquier herramienta utilizada para crear chips y que hagan ingeniería inversa.
Taiwán es uno de los mayores fabricantes de chips y maquinaria de fabricación de chips del mundo. Entonces, los dos países ya no tienen la mejor y más actualizada tecnología. Con las sanciones creciendo cada vez más, Rusia quiere comenzar a invertir en su propia fabricación, comenzando con la litografía de 90nm este año y alcanzando los 28nm para 2030.
Fuente: TomsHardware