A nivel estético la unidad no difiere demasiado del modelo que nos pudimos probar el año pasado por estas mismas fechas y tres cuartas partes de lo mismo ocurre con sus especificaciones. La unidad cuenta con un par de pantallas OLED de 0,7 pulgadas en su interior capaz de proporcionar entretenimiento envolvente y en tres dimensiones, mientras que a nivel de audio volvemos a toparnos con lo mismos Virtualphones con sonido 5.1 del modelo anterior para engañar a nuestros sentidos y que parezca que estamos recibiendo contenidos en 360 grados.
De momento parece que los únicos cambios se encuentran en un diseño algo más ligero y cómodo para poder soportar mejor las largas sesiones que se nos vienen encima.