Desde su lanzamiento y hasta el pasado 4 de agosto, la PlayStation 5 estuvo vendiendo a pérdidas, según declaró Sony. Ahora, la compañía finalmente logró comenzar a obtener ganancias, aunque parece que para ello acudió a la reducción de costos, particularmente en sus disipadores, que son muchos más pequeños en su nueva versión.
Como puede observarse en las imágenes adjuntas a continuación, el nuevo diseño interno de la PS5 incluye un disipador de calor significativamente más chico que el anterior, reduciendo la capacidad de refrigeración de sus componentes, y por lo tanto aumentando las temperaturas de operación de la consola.
Así mismo, el ventilador que acompaña al disipador también ha sido reemplazado por uno de menor tamaño, por si achicar el disipador no era suficiente:
Lamentablemente aún no hay mediciones exactas de las temperaturas que alcanza el SOC en esta nueva versión, aunque algunas mediciones sobre las salidas de aire indican que el nuevo modelo arroja temperaturas entre 3 y 5 grados Celsius más altas, por lo que la diferencia de temperatura en el SOC podría ser más alta aún. Este aumento de la temperatura afectaría no solo el rendimiento en el uso diario sino también la vida útil de la consola.
¿Qué opinan sobre esta decisión de Sony de reducir el tamaño de los disipadores de la Playstation 5?
Fuente: TechPowerUp