Intel podría estar solucionando en secreto una importante vulnerabilidad de seguridad que afecta a sus procesadores, y esto amenaza con dañar severamente el valor de su marca entre los clientes de centro de datos y computación en la nube.
La vulnerabilidad permite a los usuarios de una máquina virtual (VM) acceder a los datos de otra VM en la misma máquina física (teniendo una pérdida de memoria). Amazon, Google y Microsoft se encuentran entre los tres grandes proveedores de servicios en la nube afectados por esta vulnerabilidad, y se informa que Intel se está comunicando con los ingenieros de las tres compañías bajo un contrato de confidencialidad para lanzar un parche de software que corrija el error.
El problema es que el parche inflige una penalización de rendimiento que oscila entre el 30% y el 35% del rendimiento, lo que destroza el equilibrio rendimiento/precio frente a los procesadores de AMD, que no están afectados.
Todo esto salio a la luz por unos cambios en el kernel de Linux, sin la adecuada visibilidad y documentación. La mayor parte de los cambios implican el «aislamiento de la tabla de páginas del kernel», una característica que evita que las VM lean los datos de los demás, pero, con el costo de la merma de rendimiento. Los desarrolladores notan que estos cambios están siendo introducidos «muy rápido» por los estándares de actualización del kernel de Linux, e incluso están siendo transferidos a versiones anteriores del kernel (algo que es extremadamente raro). Como se trata de una vulnerabilidad de hardware, Linux no es la única plataforma de software vulnerable. Microsoft ha estado trabajando en un parche del kernel para Windows para solucionar este problema desde noviembre de 2017. Los procesadores AMD x86 (como Opteron, Ryzen, EPYC, etc.) son inmunes a esta vulnerabilidad.
Lo que se ve, parece ser bastante malo para todos los usuarios de Intel, especialmente considerando que recientemente ha llegado la nueva familia de Core-X, con todo lo que eso implica. Recomendamos esperar a ver los resultados reales de estas correcciones antes de empezar a sacar conclusiones apresuradas. Seguiremos el tema de cerca para mantenerlos informados.
Como broche de oro, el CEO de Intel vendió una gran cantidad de sus acciones, y solo se quedó con aquellas necesarias para ejercer en la compañía. Sin dudas una acción muy llamativa y oportuna, por todo lo que esta pasando.