Conocida por juegos como Half-Life 2 y Portal, Valve se diferencia de otras empresas en el mundo de la tecnología al utilizar una estructura planificada en la que no hay puestos de liderazgo ni gerentes a los que debas reportar. Aunque esto trae ventajas, una investigación del canal People Make Games revela que la falta de estructura también ha perjudicado a los desarrolladores y ha impedido que la empresa entregue muchos de los proyectos que inicia.
Como muestra un video publicado por el canal, la empresa utiliza la misma estructura de evaluación de empleados que está causando problemas en Blizzard. Esto significa que, al final de cada año, cada trabajador de Valve debe entregar una nota a sus compañeros y, en base a eso, la empresa definirá quién merece recibir aumentos y promociones.
Como la empresa no tiene una gestión bien definida, muchas personas no saben exactamente qué criterios deben destacarse en las evaluaciones. Como resultado, es común que se inicien proyectos más arriesgados y audaces cerca del período de evaluación, lo que sirve como una “prueba de valor” para los desarrolladores, quienes regresan a equipos más conservadores tan pronto como esto pasa.
Tal estructura dificulta el lanzamiento de juegos.
Otro problema señalado por People Play Games es la falta de diversidad entre los miembros del estudio, lo que dificulta que algunos proyectos ganen impulso. “Esto dificulta ganar impulso en cualquier cosa donde el valor agregado no sea inmediatamente obvio para ciertas personas, y eso ciertamente incluye cualquier proyecto donde se mencione la palabra ‘diversidad”, dice uno de los empleados entrevistados.
Al no haber una dirección bien definida, los empleados de Valve tienden a contratar a personas similares a ellos, algo que ocurre de forma inconsciente en la mayoría de los casos. Los encuestados también afirmaron que la única decisión reciente de la compañía que vino desde arriba y que no se puede cuestionar es abrir las puertas de Steam a cualquier tipo de contenido, algo que se atribuye al fundador y director ejecutivo Gabe Newell.
En este caso, la orden terminó molestando a algunos empleados, especialmente dado el énfasis que la empresa parecía poner en discusiones abiertas y proyectos colectivos. El periodista Chris Bratt también explica que la falta de juegos lanzados es consecuencia de la estructura abierta del desarrollador, que permite a cualquier persona trabajar en el proyecto que desee, o dejarlo sin mayores consecuencias.
“Me dijeron con certeza, que Valve habría lanzado más juegos, no necesariamente mejores juegos, pero definitivamente más, si hubieran adoptado una estructura de empresa tradicional en la que los empleados no pudieran abandonar un proyecto tan fácilmente”, explicó. Sin embargo, como Steam asegura una fuente de ingresos constante y segura para la empresa, es poco probable que esta situación cambie en un futuro cercano.