Aunque muchos desarrolladores dejaron Rusia debido a la guerra con Ucrania, los jugadores en el país aún acceden a lanzamientos recientes, pero de manera ilegal. Un estudio revela que 7 de cada 10 participantes admitieron haber pirateado al menos un juego en 2022.
A pesar de que el país siempre ha sido considerado propenso a la piratería, la situación se ha agravado con el retiro de varias empresas de la región. El estudio revela que el 51% de los que recurren a medios ilegales piratearon más juegos en 2022 que en el año anterior.
La encuesta online involucró a 1.500 participantes de todas las regiones de Rusia.
El aumento de las descargas ilegales está vinculado al cese de operaciones de muchas tiendas o plataformas en el país desde 2022. Algunas permiten acceso a contenido anterior a la guerra en Ucrania, pero muchas ya no ofrecen esa opción.
La dificultad para acceder a contenido legítimo afecta a juegos, libros, películas, música y otros tipos de entretenimiento. El 31% de los jugadores que no piratean lo atribuyen a una posición personal, mientras que el 7% no ha comprado ningún juego desde el año pasado, según el estudio.
Aunque Steam sigue operando en Rusia, ya no acepta pagos a través de medios bancarios en el país. Yegor Tomsky, director ejecutivo del estudio Watt, afirma que este proceso más complejo estimula el uso de versiones pirateadas, que son más fáciles y rápidas de obtener.
Fuente: PC Gamer