Experimentos llevados a cabo por el grupo de investigación de inteligencia artificial OpenAI, han revelado que cuando se les hace cooperar unos con otros en una tarea designada, los robots aumentan su eficiencia en dar una solución, cuando mejoran su lenguaje con el que se comunican entre sí. Los robots aprendieron a colaborar y comunicarse a través de ensayo y error, tomando nota de las señales que ayudaron a lograr el objetivo y almacenan esa información en una red neural.
“Acabamos de publicar los resultados iniciales en los que enseñamos a los robots a crear un lenguaje, dándoles la capacidad de comunicarse, y luego darles los objetivos que pueden lograrse, si mejoran la comunicación con otros robots. Añadiendo “Si un robot se da cuenta de que podría haber realizado una tarea mejor si un segundo robot hubiera enviado información diferente, el primer robot puede decirle al segundo exactamente cómo modificar sus mensajes para que sean lo más útiles posible”.
A medida que las tareas en el experimento se endurecieron, el lenguaje desarrollado por los robots también aumentó en complejidad, aunque no siempre con los resultados esperados para los investigadores. La inteligencia artificial no siempre utilizo palabras que entiendan los investigadores, muchas veces prefirieron usar palabras aisladas, para codificar oraciones enteras y de esta forma poder usar vocabularios más grandes. El problema, es que esto va en contra de los objetivos de los investigadores, que es conformar un lenguaje de inteligencia artificial que sea interpretable para los seres humanos.
Fuente: Independent