Un juez de California aprobó el pasado viernes de forma provisional un acuerdo en donde Riot tiene que pagar 100 millones de dólares a las empleadas afectadas por discriminación de género. El acuerdo prevé el pago de cantidades variables tanto a los ex empleados que demandaron a la empresa como al equipo que aún trabaja para ella.
El convenio establece que los montos deberán entregarse a mujeres que hayan formado parte de la plantilla de trabajo de la empresa entre noviembre de 2014 y diciembre de 2021. Los pagos tienen que enviarse a fines de agosto, según lo determino el tribunal.
Riot tiene que pagar 100 millones de dólares a las empleadas afectadas por discriminación de género.
Además, Riot Games tendrá que someterse a un seguimiento de tres años a agentes externos que comprobarán que no sigue discriminando a sus empleados. Esto implica asegurar que no existan disparidades salariales entre empleados y empleadas, así como el empleo a tiempo completo de 40 mujeres que actualmente trabajan bajo contratos temporales.
El valor es 10 veces superior al propuesto por Riot
Las demandas por discriminación contra el desarrollador de League of Legends comenzaron en 2018, cuando salieron a la luz las acusaciones sobre una cultura sexista. Si bien en 2019 la empresa llegó a un acuerdo que preveía el pago de US$ 10 millones en concepto de daños y perjuicios, un nuevo equipo de abogados entró en acción poco después para exigir mayores montos.
La decisión original fue desestimada por que no se tuvo en cuenta el daño real que la empresa había causado a las carreras de sus empleados y la nueva cifra es de USD 100 millones.
Riot Games no es el único desarrollador importante en los Estados Unidos que atraviesa demandas relacionadas con culturas laborales consideradas discriminatorias y abusivas. Activision Blizzard también está siendo objeto de varias demandas con acusaciones similares, que hasta la fecha han resultado en el despido de varios ejecutivos y empleados en posiciones de liderazgo.