Primera mirada y diseño
Como en toda la serie Torq, en el X3 se puede identificar un diseño simétrico apto para zurdos también, y un diseño que roza entre lo futurista y lo minimalista, pero que sin lugar a dudas se parece un poco a una nave espacial, en parte puede ser por su color grisáceo pero también por sus detalles y terminaciones. Como se puede deducir, el mouse está fabricado completamente en plástico, y cuenta con un color gris metálico en su parte superior y negro en los laterales, una combinación bastante sobria y elegante como le gusta a EVGA ya que podemos ver esta combinación incluso en la mayoría de sus placas de video, pero en el caso del X3 al conectarlo se encienden LEDs en el logo y en los indicadores de DPI para darle un aspecto algo mas agresivo y gamer.
Otro aspecto que nos llamó la atención en este producto es que al usarlo, resalta mucho la ligereza, porque claro, uno en un mouse de esta categoría espera cierta robustez que le suele dar seguridad al usuario ya que siente que está usando un producto de alta calidad, pero ese no es el caso del X3. Ojo, no estamos diciendo que EVGA alla hecho un producto de mala calidad, todo lo contrario, pero lo menciono porque es algo que llama la atención y a algunos puede gustarles que sea ligero, pero puede ser que otros prefieran algo mas pesado para controlar.
Los botones están predispuestos de igual manera que en el X5 y los X5, e incluso son prácticamente los mismos ya que solo varía el selector de DPI en el X10. Tenemos sobre la parte superior obviamente a los dos clicks junto con el scroll, que no viene retroiluminado pero si trae un grip para mejor agarre, y al lado de este tenemos 3 LEDs que nos indican en que nivel de DPI estamos y también el botón para cambiarlo. En los laterales tenemos por igual dos botones programables, ya que recordemos está diseñado simétricamente, los cuales nos van a ser muy útiles para juegos sobretodo, pero que se les puede sacar provecho en muchísimos otros programas.
Un pequeño detalle que observamos es que en los laterales, en donde iría nuestro dedo gordo y meñique, la superficie sufre una alteración y presenta ondulaciones para que hagan el efecto de grip, y de esta manera tengamos un mejor agarre a nuestro mouse. Y como es muy habitual también, EVGA ha colocado el logo de la empresa en el lomo del periférico, y para hacer que resalte mas este viene con una retroiluminación LED que le queda espectacular.
Colocado en el centro de su base tenemos el sensor óptico Pixart 3090, un modelo con menos prestaciones que el 3988 visto en el X5, que puede ofrecer hasta 4000DPI y una tasa de sondeo de 1000Hz, lo cual no está nada mal pero no tiene la precisión de un sensor láser de alto rendimiento. Por otro lado tenemos los 3 pads deslizantes que nos otorgan un movimiento excelente y casi sin fricción, y escondido por ahí tenemos un botón para cambiar de perfil, ya que recordemos que tiene una memoria capaz de almacenar hasta 5 perfiles diferentes.
Un detalle que no llama mucho la atención pero quizás algunos hayan notado, es que el cable USB surge de la parte izquierda del X3 y no del centro, algo que ya vimos en el X5 también pero que, vuelvo a repetir, no afecta en lo absoluto al uso del mouse.
En este modelo el cable viene sin trenzado, una lástima la verdad pero que en parte sirve para reducir el precio final del producto, y en la punta el conector USB 2.0 con la ficha de plástico modificada por EVGA, que ayuda a distinguir a que periférico pertenece en ese lío de cables que solemos tener en la parte trasera de nuestro gabinete.