La República Popular de China ha anunciado que impondrá requisitos de licencia de exportación para ciertos productos derivados del grafito que son fundamentales en la fabricación de baterías para vehículos eléctricos. Esta medida es en respuesta a las recientes restricciones impuestas por Estados Unidos a las exportaciones de chips de alta tecnología.
El grafito desempeña un papel crucial en la industria de los vehículos eléctricos, ya que se utiliza en la fabricación de baterías de alto rendimiento. La capacidad de procesamiento global de este material se encuentra en su mayoría en manos de China, lo que plantea desafíos significativos para los fabricantes de automóviles a nivel mundial que buscan diversificar sus fuentes de suministro.
China limita las exportaciones de grafito
A partir del 1 de diciembre, según ha anunciado el Ministerio de Comercio de China en un comunicado oficial, se implementará una medida que ha generado controversia en el ámbito internacional. China, al igual que Estados Unidos, considera el grafito como un recurso de doble uso, es decir, con aplicaciones tanto en la industria civil como en la militar. Por lo tanto, se aplicarán licencias de exportación más estrictas para este material.
Dado que China posee las mayores reservas de grafito del mundo y es el principal centro de refinación de grafito a nivel global, esta medida afecta significativamente a Estados Unidos en varios frentes. Aunque el grafito no es muy utilizado en la fabricación de chips, su disponibilidad es esencial para la fabricación de baterías, y Estados Unidos podría verse obligado a adquirirlo a un precio más elevado.
Problemas para las baterías para coches eléctricos
La situación es más crítica en el sector de los semiconductores, donde Estados Unidos ya tiene problemas con recursos como el galio y el germanio. Aunque no se utiliza mucho el grafito en la fabricación de chips, la fabricación de baterías depende de su disponibilidad, lo que podría obligar a Estados Unidos a adquirirlo a un precio más elevado.
Sin embargo, el uso fundamental del grafito radica en las baterías, en particular en las baterías de iones de litio. China parece estar tomando medidas para restringir este sector, lo que podría forzar a Estados Unidos a explorar alternativas tecnológicas que no dependan del litio o a comprar grafito a un costo significativamente mayor. Esto, a su vez, podría resultar en vehículos eléctricos más costosos, como señaló Elon Musk cuando expresó su preocupación sobre la desaceleración de la industria de vehículos eléctricos. Con este golpe de China a las exportaciones de grafito hacia Estados Unidos, la presión aumenta sobre la administración de Biden para tomar medidas que respalden sus industrias.