Al parecer no fue un problema tan grave como creímos. La disputa legal entre Remedy Entertainment y Take-Two Interactive ya se habría resuelto hace unos meses. Según el desarrollador de Alan Wake, la pelea por el logo de la «R» que también involucra a Rockstar Games, terminó a finales de 2023.
«No hay nada que ver aquí; esta fue una discusión entre nuestros equipos que se resolvió amigablemente a fines del año pasado«, dijo un representante del estudio. «El registro legal de la disputa fue simplemente una formalidad inicial, y Remedy y Take-Two continúan trabajando en asociación«.
Esta demanda fue presentada en mayo de 2023, y afirmaba que el nuevo logo de Remedy podría causar algo de confusión entre los jugadores, ya que según Take-Two, es muy parecido al de Rockstar Games. Claramente la compañía necesita usar anteojos.
Take-Two y Remedy siguen siendo amigos.
Sin embargo, debido a la falta de modificaciones en el logo de Remedy, es obvio que la situación fue solucionada sin muchos problemas. A veces es necesario iniciar un proceso legal para demostrar el uso real de las marcas.
Remedy Entertainment contó que su nueva identidad visual refleja la etapa actual del estudio. Tras el éxito con proyectos independientes como Control y Alan Wake 2, la empresa adoptará un modelo de desarrollo simultáneo de múltiples proyectos.
Entre estos proyectos, se destaca una colaboración con Rockstar Games para revivir la serie Max Payne mediante un remake que juntará las historias de sus dos primeros capítulos. A pesar de la falta de grandes actualizaciones, las compañías afirman que el juego ha avanzado considerablemente desde su fase conceptual.
Fuente: IGN