Se trata de la edición Stealth de su ya conocido Orbweaver, un periférico cuyo nombre en inglés significa «sigilo», ya que precisamente se jacta de ofrecer «feedback táctil silencioso» para que sus usuarios experimenten «sensaciones completamente nuevas».
Como el modelo original, nuestro protagonista puede ajustarse al milímetro para adaptarse al máximo a la mano del jugador, cuenta con una fuerza de actuación algo más reducida, 20 teclas programables y, por supuesto, retroiluminación para que puedas jugar en la oscuridad. El precio unos 130 dólares/EEUU.