Razer ha presentado una nueva actualización del que probablemente sea uno de los modelos más vendidos a nivel global, el Deathadder. El cambio más importante, al margen de los pequeños retoques a nivel estético, se encuentra en su sensor, que ha pasado del ya clásico modelo óptico 3,5G de 3500 dpi a un 4G de última generación regulable hasta 6400 dpi.
El resto de carácterísticas básicas se mantienen, y por tanto tenemos 1000Hz de frecuencia de Ultrapolling con 1ms de respuesta, 5 botones Hyperesponse totalmente programables, soporte Synapse 2.0, ajuste de la sensibilidad al vuelo, surfers Zero-Acoustic Ultraslick, y conexión USB bañada en oro.
El precio aun no lo sabemos pero seguramente seguirá entre 15 a 10 dolares de diferencia del actual modelo.