Según la misma Xbox 720 no necesitará conexión a Internet permanente para jugar, pero sí para otras tareas y funciones, como por ejemplo la de TV que integrará la nueva consola de los de Redmond. Obvia decir que esta información suena bastante creíble y, de hecho, es de sentido común, dada la reacción de consumidores y usuarios ante el posible “siempre online”.
Pero las buenas noticias no acaban aquí, y es que lo dicho llevaría aparejado el no bloqueo por parte de Microsoft de los juegos usados en su nueva consola de sobremesa, algo que venía fuertemente vinculado al rumor del requisito de estar siempre conectado. Finalmente tenemos una mala noticia, y es que parece que Microsoft no incluirá en Xbox 720 retrocompatibilidad con Xbox 360, dado que mantendrá la segunda en el mercado durante un tiempo quizá bastante mayor de lo esperado.