La semana pasada, Bungie, el estudio detrás de Destiny, logró un gran triunfo en su cruzada contra las trampas en los juegos online. En un enfrentamiento legal con la compañía Kunal Bansal, creadora del software de trampas LaviCheats, el juez decretó que la firma, con base en la India, debe indemnizar a Bungie con una suma que supera los 6,7 millones de dólares.
De acuerdo a los expedientes judiciales que se hicieron públicos el 8 de mayo de 2023, el juez accedió parcialmente a la petición de Bungie y emitió un fallo por defecto. El documento, que se compartio, fija un monto total de USD 6,700,973.34, que se distribuyó en diversas categorías clave durante el proceso.
Este monto incluye sanciones por varias violaciones, entre las que se cuentan USD 5,58 millones por infracciones de DMCA, USD 300,000 por violaciones a la Ley de derechos de autor, USD 579,270 por violaciones a la Ley Lanham, y adicionalmente USD 241,703,34 por gastos y honorarios de abogados. Esta resolución judicial constituye un significativo logro para Bungie en su batalla contra las trampas en los videojuegos online.
La denuncia interpuesta contra Kunal Bansal en 2021 sostiene que la compañía a cargo de LaviCheats comercializaba hacks y trampas para varios juegos. Dichas trampas se vendían bajo un esquema de suscripción y proporcionaban acceso ilegal a juegos como Apex Legends, Elden Ring, Valorant y otros títulos actualmente en el mercado.
Los cheats de vendían por medio de suscripciones
Bungie logró demostrar ante el juez que se habían creado dos versiones de software para trampas de Destiny 2 y se vendían desde la página web de LaviCheats. Asimismo, la compañía proporcionó una estimación de las ganancias que los responsables de LaviCheats habían obtenido con la venta de estas trampas.
«Bungie sostiene que para descargar cualquiera de las trampas, el usuario debía adquirirlas mediante una suscripción a precios que variaban dependiendo de la duración de la licencia y del cheat adquirido. El creador de Destiny estima que las ganancias de Bansal oscilaron entre USD 9610,38 y USD 124,098 para el truco Delta y entre USD 33,000 y USD 455,172 para el truco Ring-1. Bungie busca una compensación superior a estas ganancias ya que reclama honorarios por la marca registrada ( Ley de Derechos de Autor)», señala la demanda.
Bungie le gana a los tramposos
Esta es la segunda vez en el año que Bungie recibe un fallo favorable contra los desarrolladores tramposos. La empresa logró ganar otra batalla judicial y se llevó US$ 12 millones. En ese momento, el tribunal falló a favor de Bungie y prohibió a Claudiu-Florentin realizar cualquier acto relacionado con el cambio del código de Destiny 2.
Bungie acusó a Claudiu-Florentin de crear y comercializar cheats, que otorgaban ventajas indebidas a los jugadores que los adquirían, como la capacidad de ver a través de las paredes. La compañía señaló que esta práctica afectó negativamente la experiencia de juego de otros usuarios, además de resultar en una caída en los ingresos de la empresa.
Fuente: Thegamepost