NVIDIA y Microsoft están trabajando en una supercomputadora virtual basadas en GPU para la nube. El objetivo del diseño es acelerar los últimos algoritmos de IA para crear obras de arte aún más extrañamente realistas o realizar investigaciones de IA (Inteligencia Artificial). Todo esto con la tecnología Azure de Microsoft.
Para los que no saben que es Microsoft Azure, les cuento que es un servicio de computación en la nube creado por Microsoft para construir, probar, desplegar y administrar aplicaciones y servicios mediante el uso de sus centros de datos.
Los modelos de IA generativa resultan útiles para muchas aplicaciones. Los algoritmos de aprendizaje automático pueden crear imágenes extrañas o predecir el código fuente del futuro, y a menudo influyendo negativamente en la opinión pública por sus capacidades de «si estos llega a manos equivocadas». Una nueva asociación entre dos de las compañías tecnológicas más grandes promete acelerar estas capacidades, creando una «supercomputadora de IA» en la nube.
NVIDIA y Microsoft anunciaron una «colaboración de varios años» para construir la supercomputadora más poderosa del mundo diseñada específicamente para servir como acelerador de inteligencia artificial y algoritmos de aprendizaje automático. La asociación aprovecha la plataforma Azure basada en la nube de Microsoft con el hardware de GPU del Team Verde.
La supercomputadora tendrá decenas de miles de GPU NVIDIA
El hardware, estará conformado por «decenas de miles» de GPU NVIDIA A100 (basadas en ampere) y H100 (Hopper). La infraestructura basada en la nube incluye máquinas virtuales de las series ND y NC aceleradas por GPU de Microsoft. La tecnología de red Quantum-2 400Gb/s InfiniBand y el paquete de software de IA Enterprise de la compañía unen el dispositivo de comunicación.
Básicamente, el nuevo diseño de la supercomputadora de IA funciona como un servicio en la nube, que será parte de la plataforma Azure. NVIDIA aclaró que los clientes podrían adquirir recursos «como lo harían normalmente con una supercomputadora real», mientras que la capa de software reserva las máquinas virtuales requeridas.
Arquitectónicamente, es lo mismo que una supercomputadora física, pero opera en máquinas virtuales «en la nube». La ventaja más obvia es que no requiere un dispositivo físico dedicado en un laboratorio de investigación. Sin embargo, las capacidades proporcionadas permitirán a las empresas escalar de forma virtual «hasta formar una supercomputadora».
NVIDIA destacó que se están acelerando los avances en la tecnología de IA, la adopción de la industria está creciendo y los avances en el campo han desencadenado una ola de investigaciones, nuevas empresas y aplicaciones empresariales. La asociación con Microsoft proporcionará a los clientes e investigadores una infraestructura y un software de IA de última generación para capitalizar el poder transformador de la IA.
O, en las propias palabras de Microsoft, potentes capacidades de inteligencia artificial «para todas las empresas en Microsoft Azure».