Según parece, la primera arquitectura sería Kepler, que podría ser empleada por otros fabricantes en sus procesadores.
Este posible acuerdo podría afectar a un amplio abanico de dispositivos, pero parece que todavía tendrá que pasar tiempo antes de que veamos el clásico anuncio «NVIDIA inside» dentro de cualquier equipo. Lo que parece claro es que el fabricante no quiere quedarse como mero proveedor de chips gráficos y pretende de esta manera obtener un mayor rendimiento de sus patentes y tecnología.