NVIDIA tuvo que enfrentar un problema realmente grave cuando un famoso hacker anunció la semana pasada la existencia de una peligrosa vulnerabilidad en su controlador binario. La empresa acaba de emitir una declaración y un nuevo conjunto de controladores.
La compañía ha reconocido el problema, una vulnerabilidad de seguridad que utilizaba archivos NVIDIA UNIX para redireccionar los registros a la página VGA, y ha solucionado la fuga bastante rápido.
“Estamos resolviendo este problema bloqueándole al usuario el acceso a registros que controlan la redirección de la ventana VGA. Además, NVIDIA también bloquea el acceso a registros que podrían utilizarse para lograr una explotación similar”, dijo la compañía en un corto comunicado.
La versión 295 se actualizará pronto y la empresa también lanzó un parche para la capa de interfaz del kernel, que puede utilizarse para reparar controladores antiguos.