La Organización Europea de Consumidores (BEUC) le pidió a la Comisión Europea, el organismo ejecutivo de la Unión Europea, que lleve a cabo una investigación sobre los cambios realizados en los Joy-Cons de la Nintendo Switch.
El grupo, responsable de más de 40 organizaciones defensoras de consumidores en la Unión Europea, dijo que ya hubo más de 25.000 quejas sobre los joysticks de la Switch.
En la denuncia enviada a la Comisión Europea, el grupo acusó a Nintendo de ofrecer productos con obsolescencia programada y de “omisiones engañosas de información esencial para el consumidor”.
“Según los testimonios de los consumidores, en el 88% de los casos, los joysticks de la consola se rompieron en los primeros dos años de uso”, dijo la organización. Si bien Nintendo reparó o cambió en numerosas situaciones los Joy-Cons dañados de forma gratuita, el problema radica en que incluso los nuevos modelos de la Switch siguen trayendo los mismos joysticks defectuosos.
Ursula Pachl, subdirectora general de BEUC, dijo que a los consumidores les preocupa que la empresa continúe ofreciendo un producto que ha recibido varias advertencias por fallar temprano.
“La obsolescencia del producto significa que los consumidores a menudo tienen que comprar un nuevo conjunto de joysticks después de un corto período de tiempo, también debido a los costos desproporcionados y los cargos prácticos que enfrentarían los consumidores al intentar hacer reparaciones”, dijo Pachl.
La decisión de iniciar una investigación formal sobre el caso ahora corresponde a la Comisión Europea. Además de esta situación, Nintendo se enfrenta al inicio de dos demandas colectivas en Estados Unidos por el mismo tema.
¿Creen que los Joy-Cons de Nintendo abusan de la obsolescencia programada?
Fuente: The Verge