Según Woodside, desde que adquirieron la compañía se han dedicado principalmente a reflexionar sobre el futuro de la empresa. Asimismo, han decidido llevar a Motorola por el camino de la innovación para devolverla a sus raíces. De la misma forma, no hay que olvidar que el primer teléfono móvil del mundo, el DynaTAC, fue desarrollado por ellos en 1983.
En definitiva, Woodside ha comunicado que en los próximos meses, la empresa lanzará una nueva gama de productos entre los que se encuentra el Moto X. Haciendo hincapié de nuevo en el campo de las novedades, ha declarado que el nuevo smartphone estará dotado de una gran variedad de sensores que permitirán que el dispositivo se adelante a nuestras necesidades. Si bien tenía una versión del teléfono en el bolsillo, se negó a mostrarlo en público.
De momento, las características del Moto X son un misterio. Sin embargo, Woodside sí que ha declarado que pagar alrededor de $650 dólares por un teléfono no le parece lógico. De hecho, uno de sus objetivos principales consiste en crear una mercado de bajo coste con una alta calidad. Por otro lado, el teléfono se fabricará en Estados Unidos, concretamente en Texas, aunque los distintos componentes vendrán de mercados diferentes.