Microsoft ha renunciado a su política de poner fin al soporte para los procesadores Skylake de Intel para sus sistemas operativos más antiguos, que termina el 17 de julio de 2018. A partir del de este jueves 11 de agosto, la compañía de Redmond extenderá su soporte para Skylake en Windows 7 y 8.1, con efecto inmediato y duradero hasta el 2020 y 2023, respectivamente.
Microsoft también está extendiendo su período de soporte para Windows 7 y 8.1, en las actualizaciones de seguridad.
Las quejas de los usuarios parecen haber funcionado ya que Microsoft ha anunciado que seguirá dando soporte completo a dichos procesadores en ambos sistemas operativos.
Pero Microsoft, ha dejado claro que si queremos utilizar ZEN de AMD o Kaby Lake no nos quedará otra que instalar Windows 10.