El CEO de Intel, Pat Gelsinger, anunció durante el evento J.P Morgan Global TMC Week que la compañía consiguió «grabar» (taped-in) los tiles de computación de sus procesadores Meteor Lake, que serán los primeros procesadores del equipo azul en basarse en un proceso de fabricación de 7nm.
Este término, Taped-In, es bastante nuevo y está relacionado con los diseños chiplet que ya presentan desde hace años los AMD Ryzen con varios dies bajo el encapsulado. En otras palabras, el anuncio del CEO significa que los elementos de diseño y la IP fueron validadas para su integración en el SoC.
Ahora, solo queda que el diseño del SoC sea validado para que todo pueda ser «grabado» en un silicio. En ese momento, quedará listo para ser enviado a la fundición para su producción en masa, algo que ocurrirá recién en el año 2023.
Taping in! Good progress! https://t.co/dfQtjdDRvH
— Pat Gelsinger (@PGelsinger) May 24, 2021
Intel quiere volver al frente lo antes posible
«Hemos superado algunos de los tropiezos con los 10nm y ahora con los 7nm, y con las actualizaciones diarias que estamos recibiendo sobre las obleas que salen de la fábrica, la plena adopción de la tecnología EUV, estamos muy seguros de que tenemos que volver a la pista. De hecho, ahora mismo estamos grabando la placa de cálculo, la placa de cálculo de Meteor Lake, que está terminando de grabarse en estos momentos», dijo Pat Gelsinger.
La generación de procesadores Meteor Lake de 14ª generación se espera después de Raptor Lake, que a su vez se espera que sea el sucesor de Alder Lake, los procesadores de 12ª generación que llegarán a finales de este año con soporte para nuevas tecnologías, como DDR5 y PCIe 5.0.
Las CPUs Meteor Lake se fabricarán en un proceso de 7nm Enhanced SuperFin. Según VideoCardz, se espera que estas CPUs sean las últimas para el socket LGA1700, que hará su debut este año con los Intel Alder Lake.
Intel pisa el acelerador y avanza con sus procesadores Meteor Lake de 14ª generación, que llegarán en 2023 bajo un proceso de 7nm
Fuente: Videocardz