Según reportes, muchos metales de tierras raras y algunos otros metales elementales para la fabricación de materiales electrónicos como el cobre están sufriendo una fuerte subida de precio. El cobre por ejemplo aumentó un 37% y el estaño un 82%, lo cual supone un aumento general en el costo de fabricación de los PCBs ya que el cobre se utiliza para todas sus capas y el estaño se utiliza para soldar los componentes electrónicos al PCB, y además el costo de fabricación de todos los cables también tendrá un fuerte aumento gracias a este incremento en el costo del cobre.
El material que mayor aumento tuvo es sin dudas el litio, que ahora vale 150% más que lo que costaba el año pasado. Además, otros materiales fundamentales están aumentando junto con él, como el neodimio y el praseodimio, que han aumentado un 74% en un año, lo cual aumentará el costo de múltiples productos, desde parlantes hasta autos eléctricos y turbinas.
Otro aumento que afectará significativamente los costos de producción es el del óxido de terbio, que se usa para la fabricación de LEDs, entre otras cosas, el cual ha visto un aumento de más del 60%. Incluso el aluminio ha subido un 55%, lo cual significa un aumento en prácticamente todo lo que tenga una estructura metálica liviana, o incluso en disipadores que utilizan este material para gran parte de su cuerpo.
Según los reportes, China controla el 55% de la extracción de metales raros y un 85% de los procesos de refinado. El gobierno chino ha estado poniendo controles de exportación más estrictos este año, y podría ser una forma de combatir las disputas comerciales que tiene con EE.UU. al limitar el suministro a sus empresas. Aun así, estaría afectando a todo el mundo, ya que China es prácticamente el centro de distribución de estos productos.
Por el momento, se están llevando a cabo muchas negociaciones para mantener los precios alrededor del mundo, y si bien por ahora algunas empresas están absorbiendo estos aumentos en sus costos, tarde o temprano se verán reflejados en el precio de venta a los consumidores. Por ejemplo, la compañía dedicada a audio Sonos ya ha estado aumentando el precio de sus parlantes conforme aumentaban los componentes, y este podría ser el caso de muchas otras compañías en un futuro no muy lejano si continúan estos aumentos.
El panorama no es bueno para la electrónica y sin duda la pandemia y la falta de semiconductores están jugando un papel clave en todo esto. La falta de stock de muchos productos y todos los indicadores de que la situación no va a mejorar marcan una alerta para la industria. Veremos si las negociaciones consiguen mitigar un poco los aumentos, y esperemos que la situación mejore lo más pronto posible.
¿Qué opinan sobre estos aumentos en los metales utilizados para la fabricación de componentes electrónicos? ¿Cuánto creen que se trasladará a los usuarios?
Fuente: TechPowerUp