Teniendo en cuenta que el precio de los chips NAND y, en consecuencia, el de las SSDs ha bajado un poco, Toshiba tiene la intención de reparar la situación reduciendo o deteniendo su producción por un margen total de un 30% durante un par de meses.
La compañía espera que esta medida conduzca a la detención de esta caída en los precios NAND, aunque la empresa también tiene otras razones para hacer esto.
Micrones no tardó en aprovecharse del movimiento de Toshiba y la empresa ya ha inundado el mercado con sus propias SSDs y esto condujo a un gran aumento en los envíos en este sector.
Los precios unitarios, por otro lado, han caído, ya que el aumento de los ingresos totales del mercado de SSDs fue de sólo un 33%, por lo que los precios han caído a pesar de la reducción temporal de la producción de Toshiba.
Ahora que Samsung se trasladó a la fabricación de 21nm y a la tecnología de TLC, los precios seguramente seguirán cayendo.
Toshiba ya está fabricando chips NAND usando la tecnología de 19nm y, aunque Intel no se trasladará a un proceso más fino hasta la próxima primavera, el mercado de SSDs crecerá especialmente gracias a la disminución de los precios.
Además, el hecho de que los precios de las SSDs siguen bajando a pesar del intento de uno de los mayores fabricantes de chips NAND de detener este proceso sugiere que habrá unos cambios significativos en el sector de SSDs.