La semana pasada el equipo de desarrollo de Call of Duty publicó un informe sobre el estado de su sistema anti-trampas Ricochet. A partir del 5 de noviembre se realizaron las primeras actualizaciones del lado del servidor para Ricochet y el equipo comentó sobre el progreso actual de la herramienta.
Podemos destacar dos puntos importantes: En primer lugar, se confirmó que la nueva version de Ricochet a nivel de kernel llegará a Warzone cuando su actualización Pacific llegue en diciembre. Posteriormente, llegará a Vanguard.
#TeamRICOCHET se está preparando para la llegada de la siguiente fase en el sistema RICOCHET Anti-Cheat, el nuevo controlador de nivel de kernel de PC. Warzone será el primer título en recibir el controlador, y se lanzará junto con la actualización Pacific en diciembre. El controlador de nivel de kernel, que es un elemento del sistema multifacético RICOCHET Anti-Cheat, se agregará a Call of Duty: Vanguard en una fecha posterior.
Suspensiones permanentes para todos los juegos de la franquicia
En segundo lugar, Call of Duty está realizando cambios a su política de aplicación de seguridad y, por lo visto, serán cada vez más estrictos con quienes no sigan las reglas. Con el uso de Ricochet se podrían aplicar suspensiones permanentes que se extiendan a todos los juegos de la franquicia, incluso los juegos pasados que no utilicen este anti-cheat y los juegos que se lancen en el futuro.
Hemos realizado cambios en nuestra política de aplicación de la seguridad para Call of Duty: Vanguard.
Las infracciones extremas o repetidas de la política de seguridad, como las trampas en el juego, pueden resultar en la suspensión permanente de todas las cuentas. Además, cualquier intento de ocultar, disfrazar u ofuscar su identidad o la identidad de sus dispositivos de hardware también puede resultar en una suspensión permanente.
Las suspensiones permanentes por infracciones de seguridad ahora pueden aplicarse en toda la franquicia, incluido Call of Duty: Vanguard, así como cualquier título pasado, presente y futuro de la franquicia Call of Duty.
Esto significa que aquellas personas que sean descubiertas infringiendo las reglas de Vanguard pueden ser baneadas no sólo en este juego sino también en juegos como Modern Warfare, Infinite Warfare, Warzone y Call of Duty 2 (que aún tiene servidores activos). Además, esta medida también incluye juegos que sean lanzados en el futuro.
Recordemos que Ricochet se filtró en el mes de octubre y se le estaba aplicando ingeniera inversa para desarrollar hacks. Queda esperar a comprobar el funcionamiento de su controlador a nivel de kernel para saber qué tan efectivo será. Luego, veremos si los desarrolladores aplican o no estas sanciones extremas que banearían a jugadores de forma permanente en más de 20 juegos de la franquicia.
¿Que opinan de estas suspensiones permanentes que podría aplicar Ricochet para toda la franquicia de Call of Duty?
Fuente: Kotaku.