Según Chainalysis, una firma de investigación de criptomonedas, las ventas de NFT alcanzaron tan solo US$1 mil millones en junio. Esto marca el peor mes para las ventas de estos tokens desde junio de 2021 ($648 millones).
Ethan McMahon, economista, dijo que la desaceleración en la venta de NFT está relacionada con una disminución en el mercado de las criptomonedas en general, cuyo valor a caído de US$3 billones en noviembre de 2021 a menos de US$1 billón.
El NFT del primer tweet de Jack Dorsey, cofundador de Twitter, fue comprado por US$2.9 millones en marzo de 2021 por Sina Estavi, CEO de la empresa de blockchain Malasia Bridge, se subastó a principios de año y no recibió ninguna oferta superior a US$14.000.
El mercado de las NFT estaría desacelerándose pero algunas empresas de videojuegos siguen insistiendo con insertarlas en la industria gamer.
Esta semana, Polium de la compañía Web3, anunció la primera consola de videojuegos NFT. “La consola será lo suficientemente potente como jugar juegos de nueva generación y será fácil de usar, mas que nada para los que no entiende nada sobre la Web3”, dijeron los creadores de la misma.
Antes de su lanzamiento planificado para el tercer trimestre de 2024, los jugadores que quieran conseguir una de estas consolas deberán comprar un “Polium Pass”, es un NFT en la red Ethereum de la cual se acuñarán 10,000.
A principios de este mes, los veteranos de Sony Interactive Entertainment, Michael Mumbauer y John Garvin, anunciaron la formación de un nuevo estudio de juegos y entretenimiento llamado Liithos, que está trabajando en un juego NFT llamado Ashfall.
En Ashfall, los jugadores lucharán por sobrevivir en un mundo postapocalíptico, es una creación de Garvin, el ex director creativo y escritor del desarrollador de Days Gone, Bend Studio. Se describe como “el primer videojuego AAA Web 3.0 para PC, consola y la red Hedera”, que utiliza una “criptomoneda nativa de bajo consumo” llamada HBAR.
Fuente: The Guardian