Un nuevo estudio académico asegura que los troll de patentes cuestan a la economía global 29.000 millones de dólares anuales.
La brutal guerra de patentes entre las grandes compañías tecnológicas ha permitido el auge de terceras organizaciones dedicadas al tráfico de patentes.
Troll de patentes que están consiguiendo que la industria tecnológica sea dirigida por ejércitos de abogados y no por ingenieros y diseñadores según los más críticos, que piden directamente la suspensión de las patentes de software y la racionalización del resto para que se proteja la verdadera innovación impidiendo la presencia de mafias con la propiedad intelectual bajo telón de fondo.
Dos académicos estadounidenses especializados, James Bessen y Meuer Michael, han publicado un estudio que explica en cifras el problema: el coste de los troll de patentes a la economía global asciende a los 29.000 millones de dólares anuales.
El coste incluye principalmente gastos legales y judiciales cuya mayor parte van a bufetes de abogados o el pago de licencias que los patent trolls requieren para terminar con los litigios.
Otros hallazgos del informe indican que, no sólo las grandes corporaciones están amenazadas por los patent trolls sino también las Pymes. Además, los litigios únicamente son una parte del problema ya que en la mayoría de casos, los troll de patentes amenazan con demandas y obtienen su propósito sin tener que acudir a los tribunales.
Cuestión a resolver la de estos patent troll que compran un buen número de patentes y las imponen judicialmente contra supuestos infractores de forma agresiva, oportunista o también por encargo de compañías. Curiosamente, nunca utilizarán sus patentes para fabricar producto alguno.