Los procesadores Intel Core de novena generación son los primeros en traer una solución por hardware para las vulnerabilidades Spectre y Meltdown. Con las nuevas CPU, el fabricante ha conseguido mitigar la mayor parte de las variantes de estos ataques a través de actualizaciones de hardware, firmware y sistema operativo.
Estas grandes fallas de seguridad poseen 6 principales variantes, siendo que 2 de ellas son solucionadas por la nueva generación de procesadores Intel. Ellas incluyen “Rogue Data Cache Load” (Meltdown variante 3) y “L1 Terminal Fault” (Meltdown variante 5). Los modelos que traen la solución son los Core i9-9900K, Core i7-9700K y Core i5-9600K.
A pesar de eso, no todos los nuevos procesadores de la compañía traen estas correcciones. Este es el caso del nuevo Intel Xeon W-3175X, que es un REFRESH de la línea Core-X Skylake-X, dependen de una actualizaciones de firmware, para solucionar estos problemas.
La principal preocupación es la vulnerabilidad en torno a “Bounds Check Bypass” (Spectre variante 1). Esto demandaría cambios más profundos en la arquitectura, y por el momento so soluciona a través de software.
Según Intel, las correcciones aplicadas al hardware de la 9ª generación de procesadores no afectan el desempeño de los nuevos procesadores.