La escasez mundial de cable de fibra óptica ha hecho subir los precios, además de tener plazos de entrega super largos, poniendo en peligro los ambiciosos planes de muchas empresas de desplegar su infraestructura de telecomunicaciones de última generación.
Europa, India y China se encuentran entre las regiones más afectadas por la crisis, y los precios de la fibra aumentaron hasta un 70 % desde los mínimos históricos de marzo de 2021, de $3,70 a $6,30 por km de fibra.
Aunque la pandemia llevó a algunos de los grupos de tecnología y telecomunicaciones más grandes del mundo a reducir sus gastos, ha habido un aumento en la demanda de servicios de datos e Internet, lo que ha provocado una escasez en la disponibilidad del material crucial, la fibra óptica.
Compañías como Amazon, Google, Microsoft y Meta, propietaria de Facebook, están expandiendo sus imperios de centros de datos para satisfacer la creciente demanda, incluida la instalación de vastas redes internacionales de fibra bajo el océano. Mientras tanto, los gobiernos han establecido objetivos ambiciosos para el despliegue de banda ancha ultrarrápida y 5G, las cuales requieren que se coloquen grandes cantidades de cable de fibra óptica bajo tierra.
“Dado el costo extra que se duplicó repentinamente, ahora hay dudas sobre si los países podrán cumplir los objetivos establecidos para la construcción de infraestructura y si esto podría tener un impacto en la conectividad global”, dijo Michael Finch, analista.
El consumo total de cable aumentó un 8,1 por ciento en la primera mitad del año en comparación con el mismo período del año pasado. China representó el 46 por ciento del total, y América del Norte representa la región de más rápido crecimiento, con un 15 por ciento anual.
La falta de materia prima también azota a este sector
Otro factor que ha hecho que el cable de fibra sea más escaso es la falta de componentes vitales para la fabricación, como sucedió con los componentes de PC durante la pandemia. Una de estas materias primas es el helio, utilizado para fabricar el vidrio presente en el cable de fibra óptica.
La investigación señala que la falta de este componente en las fábricas Americanas y Rusas desde el inicio de la pandemia ha hecho que el precio del elemento suba un 135% en estos dos años. El tetracloruro de silicio es otro componente importante en la fabricación de cables y es un 50 % más caro.
Martijn Blanken, director ejecutivo de una empresa internacional de infraestructura digital, dijo que el precio de la fibra ha aumentado un 20% en los últimos seis meses y dice que la situación es tan delicada que «tiene que revisar todos los días los precios» para ver si sigue siendo el mismo.
Toda esta situación ha hecho que los clientes tengan que esperar entre 20 semanas o incluso un año, en el caso de los clientes más pequeños. Ankit Agarwal, director de uno de los mayores proveedores de fibra del Reino Unido, STL, dijo que todas las empresas de la industria están «priorizando las entregas» a «los clientes más grandes».