Entre los diversos problemas de la línea de suministro que Intel ha tenido en los últimos años, algunos argumentarían que la propia empresa abrió las puertas al éxito de AMD con su plataforma Ryzen.
Desde el lanzamiento de los procesadores Ryzen de primera generación de AMD, el Team rojo ha ido ganando lentamente una parte significativa de su cuota de mercado. Un factor que mejoró aún más todo esto, es el lanzamiento de sus procesadores de tercera generación.
En parte, eso se debe a los problemas de inventario y fabricación que tiene Intel, y la transición a los 10 nm.
Intel ahora tiene dos fábricas que están trabajando con los 10 nm, dijo el director ejecutivo Bob Swan. Ademas comento que esto implicó que intel perdiera “un poco de participación” de mercado durante el segundo trimestre, ya que la compañía priorizó sus microprocesadores de “gran núcleo”, es decir, los de mayor rendimiento. Estos procesadores se venden menos, pero ofrecen un margen de beneficio bastante más elevado, por lo que sacrificaron la producción para sus silicios más básicos.
Según comenta Swan, en 2021, Intel espera hacer la transición al nodo del proceso de fabricación de 7nm, un cambio de ritmo agresivo que pondrá a Intel de nuevo en el ritmo de cambio definido por la Ley de Moore. Según su estimación, el proceso de fabricación 7nm de Intel será competitivo con el proceso de 5nm que espera que los rivales de Intel estén utilizando para entonces, es decir, los AMD Ryzen gracias al apoyo de TSMC.
Por otro lado, también se dieron a conocer los resultados financieros de Intel para el segundo trimestre de 2019, lo que reveló una caída en las ganancias de un 17 por ciento, mientras que los ingresos cayeron en un 3%. Estas pérdidas se debieron a la falta de stock de sus CPUs.
Al anunciar la noticia, Intel también ha indicado que los precios de las unidades de estado sólido probablemente se mantendrán estables. Incluso pueden incluso bajar aun más los precios. ¿Por qué? Bueno, al parecer, están trabajando con un exceso de oferta de memoria flash.
Es básicamente lo que hablamos siempre, oferta y demanda. Por el momento, la oferta (en Intel) está mucho más allá de la demanda en el mercado de SSD. Ahora todo lo que tienen que hacer es intentar arreglar eso con sus procesadores.