El factor de forma mini-ITX ha ganado una gran popularidad entre los fabricantes de placas base en el último par de años y parece que Gigabyte optó por este mismo formato en la construcción de una nueva solución H61 compacta, denominada H61N-USB3.
Teniendo en cuenta que se trata de un modelo de nivel básico, la nueva placa base no empaqueta tantas características como sus hermanas más caras, pero los usuarios todavía se beneficiarán del soporte USB 3.0, así como del diseño Super4 de Gigabyte.
Según la empresa, este enfoque ofrece una serie de ventajas sobre otras soluciones de la competencia incluyendo compatibilidad con dos BIOS, todos los condensadores sólidos japoneses, estranguladores de núcleo de ferrita, la tecnología Ultra Durable 2, MOSFETs RDS bajos y un códec de audio HD 108dB de alta gama.
Además, la placa proporciona energía de procesamiento de cuatro fases, dos sockets DIMM que admiten hasta 16 GB de memoria DDR3 y un par de puertos SATA de 3Gbps.
En cuanto a los gráficos, los usuarios pueden optar por los modelos integrados en las CPUs Sandy Bridge o pueden agregar una GPU dedicada a través de la ranura PCI Express x16.
En el panel de opciones de E/S de la placa podemos observar todos los puertos y los conectores básicos que uno esperaría encontrar en la configuración de una placa base.
La lista incluye conectores DVI y VGA, cuatro puertos USB 2.0 y dos puertos USB 3.0 (impulsados por un controlador Fresco Logic FL1009), un puerto Gigabit Ethernet y sonido de 5.1 canales con salida óptica coaxial S/PDIF.
Una salida de vídeo HDMI y un puerto eSATA completan la lista de opciones ofreciendo a los usuarios todo lo que necesiten para la construcción de un sistema HTPC compacto.
La placa Gigabyte H61N-USB3 ya está disponible en las tiendas de Hong Kong, donde se vende por 3.090 dólares taiwaneses (106 dólares).