Peter Moore, quien fue el responsable de manejar los lanzamientos de juegos para Dreamcast y Xbox 360, admitió que durante su mandato, Microsoft fomentó la llamada “guerra de consolas”. El exejecutivo afirmó, durante una entrevista en el podcast Front Office Sports, que su objetivo era promover la competencia contra Sony y su PlayStation 3.
“No impulsamos la guerra de consolas para crear divisiones, sino para desafiarnos unos a otros”, explicó Moore. Según él, este tipo de táctica ayudó a Microsoft a mantenerse en el mercado, enriqueciendo las opciones de juegos disponibles en la actualidad.
“Si Microsoft se hubiera rendido luego de los muchos casos de los “anillo rojo de la muerte”, la industria de los juegos sería un lugar mucho mas pobre y mediocre, no tendríamos la competencia que tenemos hoy”. El “anillo rojo de la muerte” era un problema bastante común entre las primeras unidades de la Xbox 360, debido al sobrecalentamiento de la consola que dañaba permanentemente sus componentes. Esto obligó a Microsoft a crear un reemplazo y lanzar una versión mejorada de la consola con una placa de circuitos nueva.
La decisión de Microsoft de asumir pérdidas y reemplazar todas las unidades defectuosas de la Xbox 360 fue primordial para la supervivencia de la marca. El exejecutivo dice que si no lo hubieran hecho, lo más probable es que la línea de consolas ya no existiera.
Microsoft reemplazó aproximadamente 3 millones de unidades de Xbox 360, a un costo estimado de US$1.15 mil millones.
Durante su tiempo al frente de Xbox, Moore se hizo conocido especialmente por los “tatuajes” que se hacía promocionando juegos.
Fuente: Eurogamer