Binance, la mayor plataforma de intercambio de criptodivisas, está siendo investigado tanto por el Departamento de Justicia de EE. UU. como por el IRS. Desde su fundación en 2017, Binance ha sido la puerta hacia el mundo de las criptomonedas y que los ojos de la justicia y los servicios fiscales estén puestos en él no debería ser una sorpresa. Incorporada en las Islas Caimán, un conocido paraíso offshore para la evasión de impuestos, la empresa tiene una oficina operativa en Singapur y, por lo tanto, ha podido eludir enormes cantidades de impuestos (como hacen muchas otras empresas más tradicionales).
La investigación no debería sorprendernos, no es una sorpresa considerando cómo las criptomonedas, a pesar de todo su impacto tecnológico y económico, es una de las monedas más comunes en uso para la el apoyo de actividades ilegales.
Según Chainalysis.inc, una empresa especializada en el escrutinio del mercado de las criptomonedas, Binance era la principal bolsa de criptomonedas a través de la cual se dirigían los fondos derivados de las actividades ilegales. Según la empresa, la cantidad de dinero atribuida a actividades ilegales tampoco es baja; Chainalysis estimó que Binance fue la puerta de entrada elegida para mover más de 756 millones de dólares en actividades ilegales, un buen porcentaje de su flujo de 2.800 millones de dólares en ese mismo año. Todavía no se ha anunciado ninguna investigación formal, pero esto podría ser el preludio de una inmersión más profunda en las finanzas de la empresa y la posible habilitación de actividades delictivas.
Binance ya se proclamo y dijo: «Nos tomamos muy en serio nuestras obligaciones legales y nos relacionamos con los reguladores y la aplicación de la ley de manera colaborativa«.
Como pasa con estos temas, tendremos que esperar para conocer qué sucederá.
Fuente: Techspot