La situación entre Estados Unidos y China empeora cada vez más. Según se informa, la Oficina de Industria y Seguridad del Departamento de Comercio de EE.UU. ha agregado a Sitonholy, un proveedor chino líder de hardware que incluye procesadores Intel y GPU NVIDIA, a su lista negra. Ahora, las empresas estadounidenses que buscan hacer negocios con Sitonholy deben obtener una licencia de exportación del gobierno de Estados Unidos. Esta decisión afecta a la empresa china, pero también golpea muy fuertemente a Intel y NVIDIA.
Sitonholy es uno de los proveedores chinos más importantes que vende hardware como procesadores Intel y gráficas NVIDIA en China.
Durante una audiencia del subcomité del Senado de EE.UU., Kevin Kurland, un funcionario de control de exportaciones, anunció que esta semana el gobierno de EE.UU. ha añadido cuatro empresas chinas a su lista de exportaciones restringidas. Estas empresas fueron identificadas por su implicación en la obtención de chips de inteligencia artificial para el ejército chino. Las compañías afectadas son Linkzol Technology, Xi’an Like Innovative Information Technology, Beijing Anwise Technology y, la ya mencionada, Sitonholy (Tianjin).
Más compañías chinas a la lista negra de Estados Unidos.
En respuesta, un vocero del Ministerio de Relaciones Exteriores de China criticó a Estados Unidos por usar restricciones de exportación para atacar de manera injusta a empresas chinas, y le pidió a EE.UU detener la politización de asuntos comerciales y tecnológicos.
Además, Estados Unidos ha impuesto limitaciones a otras cinco empresas marcadas por su participación en la fabricación y obtención de drones utilizados por Rusia en Ucrania y por los hutíes, respaldados por Irán, en ataques a la navegación en el Mar Rojo. Entre estas empresas se incluyen Jiangxi Xintuo Enterprise y Shenzhen Jiasibo Technology, ambas vinculadas a las fuerzas militares rusas e iraníes.
Las medidas tomadas contra estas compañías resaltan la competencia estratégica actual y las preocupaciones de seguridad de Estados Unidos. Esto está sucediendo mientras China aumenta su gasto militar, con el presidente Xi Jinping trabajando para establecer un ejército de «clase mundial» para 2050. Estados Unidos ve esto como una amenaza evidente, tanto a nivel nacional como global.
Fuente: JapanTimes