El estudio polaco Critical Hit Games, creado en 2020 que cuenta con el respaldo de la editorial Plaion, ha lanzado su primer juego, Nobody Wants to Die.
Nobody Wants to Die es un juego neo-noir que está ambientada en una Nueva York distópica. El es año es 2329, la tecnología ha dotado a las personas de vida eterna, ahora la conciencia puede almacenarse en bancos de memoria o transferirse de un cuerpo a otro. Siempre que esté a tu alcance pagar la suscripción.
Los jugadores asumirán el papel del detective James Carra. Tras una experiencia cercana a la muerte, el detective, junto con la joven policía Sara Kaya, sigue la pista de un asesino en serie, en donde van descubren los oscuros secretos de la élite de la ciudad.
Nobody Wants to Die Llega a PC
Para reconstruir la cadena de acontecimientos que precedieron a cada asesinato y determinar las circunstancias de la muerte de las víctimas, los jugadores tendrán que examinar las escenas del crimen utilizando un dispositivo de gestión del tiempo y tecnología avanzada.
«En un mundo con vida eterna, donde la muerte casi se olvida y la moralidad desaparece ante nuestros ojos, encarnarás a un detective experimentado. Asimismo, tendrás que permanecer en la delgada línea entre el bien y el mal, y, a su vez, recorrer por ella el camino hacia la dura verdad», afirma la descripción del juego en Steam.
El anuncio de Nobody Wants to Die estuvo acompañado de un tráiler de dos minutos. Seguramente quedes impresionado con el video.
Nobody Wants to Die se lanzará en 2024 en PC, PS5, Xbox Series X y S. Prometen una historia que explora los peligros del transhumanismo y la inmortalidad, con gráficos fotorrealistas en Unreal Engine 5.
Todo me hace acordar a Altered Carbon
«Altered Carbon» es una serie de ciencia ficción basada en la novela de Richard K. Morgan. Ambientada en un futuro distópico donde la conciencia humana puede ser digitalizada y almacenada, la trama gira en torno a la reencarnación, la inmortalidad y la identidad. En este mundo, las «pilas corticales» implantadas en la nuca permiten a las personas transferir sus conciencias a nuevos cuerpos, o «fundas», lo que hace posible la vida eterna para aquellos que pueden permitírselo.