Todas las demos que mostramos de Xbox One de E3 2013, en un principio se pensó que estas demos de juegos corrían sobre la propia consola, pero nada más alejado de la realidad.
Lo que tuvimos ocasión de ver en el E3 en relación a Xbox One funcionaba nada más y nada menos que sobre PCs equipados con Windows 7 y tarjetas gráficas GeForce serie GTX 700.
El sonido característico de Windows que se escuchó durante la demo de Dead Rising 3 y, para rematar, el hecho de que uno de los asistentes vio como se colgaba uno de los juegos que estaba probando y el sistema volvía al escritorio de Windows 7, como se aprecia en la imagen.
Peter Moore, COO de EA, comentó que los sistemas utilizados durante la presentación realizada en el E3 son “equivalentes” a los kits de desarrollo para Xbox One, en un claro intento de suavizar un poco el asunto. Desde luego es evidente que una GTX 700 no es “similar” a una HD 7790, que es la GPU que utiliza Xbox One.