Nokia cuenta con un plan por si el acuerdo estratégico que mantiene con Microsoft y su sistema operativo móvil Windows Phone fracasa.
Pero este proyecto no pasa por Symbian –el sistema móvil histórico elegido por Nokia– ya que se trata de Meebo, un entorno cuya presencia en el mercado es casi nula y la finlandesa decidió transferir su soporte y desarrollo a Accenture.
El acuerdo de colaboración entre Nokia y Microsoft para competir en el mercado de los «smartphones» cumplió en marzo su primer año.
Durante este tiempo la gama Lumia de la finladesa ha conseguido hacerse un hueco entre sus principales rivales, Android y Apple, aunque todavía le queda mucho que superar, señaló la agencia Europa Press.
Dada la competitividad que existe en la actualidad en el sector de los dispositivos móviles, ninguna compañía tiene su puesto asegurado entre los primeros en el ranking de ventas -algo que ya ha comprobado RIM- por lo que es importante que cuenten con lo que se puede denominar «Plan B».
En una entrevista concedida al canal de televisión finlandés Yle, el presidente de la junta de Nokia, Risto Siilasmaa, ha asegurado que la compañía cuenta con un plan de contingencia en el caso de que el acuerdo con Microsoft fracase, aunque afirma que tienen «plena confianza» tanto en el CEO de Nokia, Stephen Elop, como en su plataforma Windows Phone.
Siilasmaa no especificó en qué consiste ese «Plan B» de Nokia pero sí aseguró que no tenía nada que ver con Symbian ya que la «cuota de Symbian en el mercado se ha reducido casi a cero».
Además, también tuvo palabras para la nueva versión para dispositivos móviles de Microsoft, Windows 8, asegurando que «es una plataforma tecnológica de primer nivel capaz de proporcionar a los usuarios una experiencia de usuario sin fisuras a través de múltiples plataformas, desde PC a tabletas y teléfonos inteligentes».
El CEO de Nokia, Stephen Elop, ha admitido en otra entrevista ciertos fallos en la estrategia, ya que no habían podido prever los rápidos cambios que se han producido en la industria de telefonía móvil y esto se debió en parte a los problemas de la empresa finlandesa.
«Hemos tenido momentos en el último año y medio en los que podríamos haber hecho algunas cosas de manera diferente si hubiéramos sabido que la industria estaba cambiando tan rápidamente», asegura.