El 15-16 de junio de celebra el congreso internacional Futuro Global 2045 en el Lincoln Center de Nueva York, y se centró en la discusión de una nueva estrategia evolutiva para la humanidad encaminada a superar los retos de la civilización del siglo 21.
La Iniciativa 2045 fue fundada por el empresario ruso Dmitry Itskov en febrero de 2011 con la participación de los principales especialistas rusos en el campo de las interfaces neurales, la robótica, los órganos y los sistemas artificiales.
Dmitri Itskov, un joven multimillonario ruso, que pretende vivir para siempre a través de una copia robótica de sí mismo, a la que trasplantaría su propia mente. Eso es lo que se proponen él y las más de 38.000 personas que se han inscrito a la Iniciativa 2045 impulsada por Itskov.
“Creemos que no solo es posible sino también necesario vencer el envejecimiento e incluso la muerte y superar los límites fundamentales de la capacidad física y mental humana”, proclama un manifiesto de Rusia 2045, el proyecto principal de Dmitri Itskov, que prevé crear un robot humanoide controlable a distancia e incluso un avatar-holograma.
“Los organismos artificiales no necesitarán los recursos que nosotros necesitamos actualmente para mantener la vida. Las personas serán capaces de vivir fuera de nuestro planeta. Un cuerpo artificial puede existir en planetas donde el cuerpo biológico no puede sobrevivir”, dibuja su futuro ideal Dmitri Itskov.
Itskov está convencido de que su proyecto no dividirá la futura sociedad del planeta entre personas ricas inmortales y pobres mortales. Cree, al contrario, que las altas tecnologías ayudarán a prolongar la vida de las personas corrientes.