Windows Phone, un sistema operativo de Microsoft diseñado para competir en el mercado de dispositivos móviles, que no pudo encontrar su lugar en un mundo dominado por Android. En ese momento, iOS y BlackBerry OS eran otros sistema operativo de la época, aunque de menor relevancia, mantenían una presencia que no podía pasarse por alto.
A pesar de alcanzar una cuota de mercado significativa en ciertos lugares, Windows Phone poco a poco perdió terreno hasta desaparecer completamente, siguiendo un camino similar al de BlackBerry OS. En última instancia, ambos sistemas operativos fueron descartados en favor de Android e iOS, dejando solo a estos dos como los líderes indiscutibles en el mercado.
En una reciente entrevista, Satya Nadella, el CEO de Microsoft, se enfrentó a preguntas interesantes. Una de las más destacadas se centró en Windows Phone y si había alguna decisión que lamentara. Su respuesta apuntó directamente a la retirada de Microsoft del sector de dispositivos móviles.
Windows Phone podía salvarse
Nadella compartió sus reflexiones diciendo: «Creo que la decisión de la que habla mucha gente (y una de las decisiones más difíciles que tomé cuando me convertí en CEO) fue nuestra salida de la telefonía móvil. En retrospectiva, creo que podría haber habido maneras de hacerlo funcionar, quizás reinventando la categoría de computación entre PC, tablets y teléfonos».
Aunque Nadella no se refirió explícitamente a Windows Phone, su comentario deja claro a qué sistema operativo se refiere. Ha habido debates acerca de si Windows Phone podría haber competido con éxito contra Android. Aunque quizás podría haberse mantenido como un tercer jugador en un mercado dominado por Android e iOS, es poco probable que hubiera desafiado el liderazgo de Android.