Dado que el sistema operativo Windows 8 de Microsoft está a la vuelta de la esquina, parece que los ordenadores portátiles con pantalla táctil serán mucho más populares de lo que se había estimado inicialmente. Dicha estimación prácticamente se ha duplicado en el último período desde un 5 por ciento a un 10 por ciento.
La adición de una pantalla táctil a un portátil de 13 pulgadas aumentará el coste de fabricación del dispositivo por unos 75 dólares. Para un dispositivo de 15 pulgadas, los fabricantes de
equipos originales probablemente gastarán unos 82 dólares para esta implementación.
Aunque no parezca mucho dinero, todo viene en un periodo en que Intel está haciendo todo lo posible para bajar los precios de los ultrabooks para aumentar las ventas.
A los fabricantes de equipos portátiles no les gusta disminuir los márgenes y prefieren agregar nuevas funcionalidades, como pantallas táctiles, para atraer a los clientes y aumentar las ventas y las ganancias.
Intel preferiría que los OEMs bajen sus precios en vez de implementar características que aumenten los precios de sus dispositivos, pero parece que al menos ASUS y Acer están planeando seriamente vender y promover dispositivos más costosos con pantalla táctil.
La agregación de los materiales mencionados anteriormente, que cuestan unos 75 o 82 dólares, aumentarán el precio final de los portátiles por 150 y 164 dólares, respectivamente.
Intel está en contra de estos aumentos de precio, pero ASUS y Acer esperan que aproximadamente el 10 por ciento de sus portátiles que venderán este año tengan pantallas táctiles.
HP y Lenovo se han quedado un poco por detrás de los dos fabricantes, pero también están desarrollando sus propios portátiles con pantalla táctil.
Queda muy poco hasta que esos portátiles con pantallas táctiles se instalen con tapas girables y probablemente la mayoría de los sistemas móviles serán tabletas convertibles hasta el 2015.